Somos lo que comemos y no hay más. La base está en cumplir con una dieta balanceada y reforzar ciertos nutrientes que nos mejoran la calidad de vida, limpieza del organismo, mejoran índices de colesterol-triglicéridos-control de glicemia, etc. Acá Nutravelina entrega un gran soporte.
¿Qué es la alimentación saludable? ¿Qué características que debe tener una alimentación saludable?
Alimentación saludable es cumplir con la combinación de Calidad, Cantidad y Horarios de los alimentos. Cuando se logra adquirir esta combinación, el estado nutricional de las personas mejora y llega a estar dentro de los rangos normales. Se demuestra tanto en exámenes Físicos (peso, porcentajes de grasa, centímetros de contorno, musculatura) como internos (niveles de glicemia, colesterol, minerales, vitaminas, otros).
A mi criterio, la alimentación saludable debe ser con los estándares de una dieta tipo Mediterránea, con sus tipos de alimentos, frecuencias establecidas de su consumo y mezclas.
¿Cómo se puede adoptar una dieta para tener una alimentación saludable? (qué alimentos consumir a diario).
Siempre con la guía de una nutricionista, para que refuerce el hábito y entregue técnicas para controlar malos hábitos. Además, se debe estimar las cantidades de calorías y macro-micro nutrientes que son tan específicas dependiendo de cada persona. La variedad de la dieta se mantiene estándar a excepción de la presencia de alguna enfermedad que lo impida o que limite el consumo de algún alimento específico.
Una dieta Mediterránea es rica en frutas, verduras, legumbres, lácteos descremados, huevos, aceites vegetales del tipo oliva-canola, frutos secos, pescados, cereales y granos integrales y muy poca carne roja. Es rica en especias y hierbas, lo que le entrega sabor, nutrición funcional extra como antioxidantes y además ayuda a controlar la ansiedad a través de intensificación de los sabores. En la dieta Mediterránea, los quesos son bienvenidos bajo ciertas ¡condiciones y porciones!
Respecto a las grasas, ¿qué alimentos hay que evitar?
Siempre evitar grasas animales como mantecas, carnes grasosas, embutidos, grandes cantidades de quesos, frituras, grasas de margarinas, alimentos que las contengan. Esto es porque afectan negativamente en el sistema cardiovascular, forman placas de ateromas, suben colesterol y aumenta la probabilidad de sufrir infartos, incapacidad como secuelas y la muerte. Una dieta alta en este tipo de grasas crea sobrepeso-obesidad y enfermedades crónicas no transmisibles, cáncer.
Elegir grasas vegetales como frutos secos, aceites vegetales de oliva, canola, pepita de uva, de coco, palta y aceitunas. Las cantidades deben ser determinadas por una nutricionista.
Elegir grasas provenientes de los pescados como salmón, atún, choritos-mejillones (ricas en omega 3).
Elaborado por:
Catalina Miranda, Nutricionista
@catalanutri